Terminaba, en el post anterior, comentando que la Administración se enfrenta a los siguientes desafíos
Al cambio cultural: La modernización de la Administración
Al cambio del poder: Las relaciones entre las Administraciones
Al cambio tecnológico: La prestación de servicios
Pero antes de hablar en detalle de estos desafíos hablemos de dos condicionantes:
1.- La dotación de recursos y presupuesto
La dotación de presupuesto y de recursos y tanto materiales como personales resultan siempre insuficientes. Además, esa inversión tiene que venir acompañada de los correspondientes cambios organizativos, que son difíciles de lograr en plazos cortos.
Por otro lado el proceso de oposición es lento y la promoción en la carrera administrativa está todavía lejos de realizarse por criterios de competencia y de independencia.
2.- La Cooperación entre Departamentos y Administraciones. Aprovechar la experiencia.
Hay dificultades en lo relacionado con la coordinación y delimitación de competencias entre Ministerios y organismos. Los mecanismos de cooperación se revelan gastados, ineficientes y obsoletos. La utilización de técnicas de creación de grupos de calidad y la especialización en la definición de determinados servicios serviría para aprovechar las capacidades que cada organismo puede desarrollar.
Cambio cultural: La modernización de la Administración
El reto: cualquier ciudadano tendrá acceso a los mismos recursos de información, disminuyendo las desigualdades que se producen entre áreas urbanas y rurales.
No es posible modernizar sin cambiar. Decía Lampedusa que «Hay que cambiarlo todo para que nada cambie», sin embargo lo que hay que hacer es “cambiar lo necesario para que cambie casi todo”.
En primer lugar las estrategias, el diseño y el control de la Administración electrónica y de la utilización de las Nuevas Tecnologías para ofrecer los servicios a los ciudadanos, deben estar al margen de la temporalidad política y de la obtención de resultados rápidos y espectaculares. En este sentido, es imprescindible que exista autoridad y liderazgo con capacidad de decisión, que establezca objetivos y responsabilidades en relación a la Administración electrónica.
En segundo lugar debe haber un cambio interno, que genere confianza en el ciudadano.
La Administración del moderna será
En segundo lugar La organización y las funciones debe estar basada en los servicios que presta con estructuras colaborativas y sin delimitación territoriales o competenciales. El marco normativo debe estar acorde con el nuevo contexto. La contratación adaptada al mercado de las Tenologías. Las acciones de formación e información son vitales en el abandono de la cultura del papel y la resistencia al cambio, hay que explicar que los cambios no suponen una pérdida de poder, si no un cambio de función más eficiente y una posibilidad de motivación. Los niveles inferiores deben tener iniciativa. La estructura , basada en el control centralizado en niveles superiores y la falta de iniciativa de los inferiores no impulsa la modernización.
Cambio del poder: Las relaciones entre las Administraciones.
La descentralización del gobierno y la creciente interdependencia entre organizaciones (UE, AGE, Autonomías y los gobierno locales) requiere un cambio en las reglas de prestación de los servicios públicos con un objetivo claro: innovación, relaciones e interoperabilidad.
Las distintas Administraciones deben tener una visión compartida y un alinamiento de intereses en materio de innovación y desarrollo: Establecer un Plan nacional de colaboración en la Administración Electrónica y aprovechar la sinergia trabajando en común, reutilizando servicios e interoperando. Trabajar por desarrollar soluciones para compartir.
Asimismo una infraestructura de comunicaciones común ahorraría inversiones en comunicaciones.
Estar cerca del ciudadano es darle el mismo servicio desde el punto que el decida por el canal que le sea más accesible. La descentralización y la difusión de las fronteras territoriales de competencias deben verse como un valor positivo y un factor diferencial.
Cambio tecnológico: La prestación de servicios-on-line
La prestación de servicios se centra en las relaciones con la ciudadanía.
La Administración Española ha realizado grandes esfuerzos en la mejora y la oferta de servicios on-line, pero está obligada frente al ciudadano, a rentabilizar estas inversiones.
Algunosretos en este campo son:
Atender la demanda de la Sociedad
La priorización de los servicios que habrán de ser ofrecidos en línea, debe ser de acuerdo con su interés para ciudadanos y empresas, su impacto en términos cuantitativos, las mejoras en la gestión interna etc.
Servicios con un enorme impacto potencial para el desarrollo de la S. I. en su conjunto y para la mejora de la eficiencia de la Administración deberían abordarse prioritariamente.La simplificación de procesos deberá llevarse a cabo una actuación específica, dirigida a eliminar aquellos procedimientos que se demuestren innecesarios así como simplificar aquellos otros que estén mal diseñados o que no funcionen correctamente. El desafió pasa por el rediseño y la búsqueda de nuevos funciones, no por la adaptación.
El formato digital de la información.
Durante años, el conocimiento ha sido almacenado en diferentes soportes de naturaleza analógica. Los avances de las últimas décadas han facilitado almacenar información en formato digital. Abordar el desarrollo y la definición de Archivo electrónico (qué conservar y cómo conservarlo) es inaplazable a riesgo es que dentro de unos años haya un agujero en la historia administrativa.En este punto también podemos considerar, como otro de los desafios actuales, la Identificación y firma digital. Se espera que la introducción del DNI electrónico impulse notablemente el uso de los servicios electrónicos. Pero aún queda por resolver cuando se requiere la firma, qué función tiene en cada uso y cuando conservarla más allá de la caducidad.
Estimular la innovación
La innovación entendida como la introducción de nuevas ideas, productos, servicios y prácticas con la intención de ser útiles, no tienen porque ser necesariamente tecnológica, también puede ser una innovación en el proceso.Algunas organizaciones importantes, como la Banca, tienen «centros de innovación internos» dedicados al diseño de srvicios puraente on-line y de valor añadido.
Es experiencia podrá implantarse en la Administración creando un “centro de innovación de la Administración Electrónica” (INovAE) dedicado a colaborar, de forma activa y práctica, en el diseño e implementación de un modelo sostenible de Administración electrónica, basado en el uso adecuado de las Tecnologías de la Información en la Administración y en la formación y el aprendizaje del funcionariado.
El centro (que puede ser tan solo un grupo de expertos), se centraría en :
· El análisis de la demanda de la ciudadanía, lista de los servicios ofrecidos y valoración del uso, análisis de los cambios normativos y organizativos.
· La propuesta de nuevos servicios, de mejoras de procesos, de la normalización de formatos, de personalización de los servicios.
· La difusión de servicios ofrecidos por la Administración.
Categorías:Administración Electrónica
Tremendo, pero desde esta visión erudita habría que matizar numerosos detalles que vemos el día a día y francamente desencantan:
– El cambio en las AAPP: Hoy en día la visión de Lampedusa es completamente acertada. Cambian los gobiernos y éstos a los Directores Generales, quienes a su vez cambian a los Subdirectores, y ¿el resultado?: España permanece en cola de la Sociedad de la Información.
O sea se cambia la superficie de las cosas, lo que indudablemente genera ingentes trabajos a los sufridos funcionarios que resultan afectados, pero no se cambia el status-quo, o sea el modo de funcionar en los Ministerios. Y ¡ay del que se atreva a intentarlo!.
– Relaciones con las CCAA: Las CCAA no tienen ningún interés en colaborar con la AC (Administración Central), salvo para poner la mano y recibir fondos. Es más, el interés de una CCAA es distanciarse de la AC ya que la supervivencia de la misma (más bién del partido autonomista de turno) se basa en demostrar que ellos son claramente distintos e independientes de la AC.
– Servicios ON-LINE: Se diga lo que se diga, existe una desesperante proliferación de servicios ON-LINE de las AAPP todos distintos e incompatibles, que crean una gran confusión en los Ciudadanos y Empresas. Por poner un ejemplo: Cada Ministerio tiene su Registro Telemático que se basa en sus propias normas y usa su propio interfaz de usuario. Idem está pasando con las Notificaciones Telemáticas. Idem con las primeras implantaciones de CRM, todos diferentes. ¿Que hay de los pagos ON-LINE?. En definitiva, se diría también que cada Centro de Informática tiene su chiringuito y no quiere que nadie se lo toque, para lo que no duda en hacer la guerra por su cuenta. Todo ello en detrimento no sólo del gasto público sino sobre todo del servicio público que es mucho peor de lo que debiera.
Parece que la implantación de la eAdministración en lugar de resolver los problemas del enredado conjunto de servicios a los cuidadanos no hace más que consolidar los errores históricos en este terreno.
Y todo ello con independiencia del partido en el poder. Se diría que gobiernen unos u otros nadie es capaz de poner coto y orden en este desaguisado, generalmente creado por jefecillos administrativos de tres al cuarto, que creen que los servicios electrónicos administrativos son de su exclusiva propiedad.
Ciewrto en el proximo post te explico la razon.